Hace años, mi buen compañero Manel Espallargas, me preguntaba por el coche que me gustaría, si se diese el caso, tener como primera referencia de mi propia marca; en resina, a escala 1:32 y para slot; teniendo en cuenta que no debería haberse reproducido anteriormente. Mi respuesta fue clara, el Panhard Levassor (PL) 17 -Panhard PL17-. Aunque nunca más volvimos a hablar de ello, años después, mi buen amigo Jordi Molist me confirmaba que, nuestro común, Jordi Freixes, le había puesto a la PL 17 en los talleres de Hobbyproject, ala Oeste de Hobby Classic. Con este modelo Hobbyproject se consolida como una de las mejores y más productivas marcas, especializada en trabajos realizados para terceras marcas, como dice Jordi, con mucho amor..., y eso se nota. CHECKERED FLAG SLOT CARS: Distribuido por Jordi Freixes. checkeredflagslot@gmail.com. Tlf. 638.822.811.
Había pensado en comenzar por su versión civil (click), sin embargo he preferido comenzar con una primera entrada dedicada al cochecito, cómo no haciendo referencia al Monte del '61, otro de esos Montes polémicos..., muy polémicos.
Si bien ambas cajas, versión Monte Carlo y versión civil, son iguales, la diferencia la encontramos, como es lógico, en su interior..., en esta una Panhard PL 17, la ganadora del Monte Carlo en manos de Maurice Martin y Robert Bateau, quienes finalmente se llevaron 12.000 francos -Para los LOGSE: francos franceses, que el español era con mayúscula la primera, sólo uno y de nombre Franciso- de premio principesco. Franceses 1, alemanes 0; ahora que sólo podemos hablar en términos balompédicos.
Ahora que algunas pequeñas marcas experimentan con la gaseosa, digo gasolina..., digo que no sé lo que digo, y con otras escalas..., Hobbyproject ha decidido para este PL17, partir de cero en sus trabajos con el master; labrado a mano de cero en Francia por, permítanme mantener su anonimato, "Monsier Ambulance" y partiendo de las cotas reales del PL 17. Eso sí, tomando buena nota de los trabajos a 1:18 y 1:43 realizados por otros. Aquí en la foto con un 1:43, con el que encontramos algunas diferencias claras, incluso de decoración.
El Monte del '61, la trigésima edición cincuenta años después de la primera disputada en 1911, edición no sólo no exenta de polémica, sino titulada por muchos como El Fiasco de Montecarlo. Dicho enfado, de todos menos de los franceses y los de Panhard, se derivó de la fórmula utilizada para igualar "tiempos", que no para hacer más divertido el Rally.
La fórmula, matemática, comenzaba mal; donde "R" era denominado el "factor de comparación". Así:
r=C/P donde C es la capacidad en centímetros cúbicos y P es (p+2c), donde p es el peso de homologación en unidades de 100 kilogramos. Pero, siempre hay peros para armar a los descontentos, los motores de dos tiempos mantendrían los mismos factores que los de cuatro tiempos; razón por la que Auto Union decidió no entrar al Monte, vaaaale, DKW.
Periodistas y expertos se lanzaban a realizar previsiones, cálculos, más o menos informados, sobre lo que daría de sí la fórmula; a quién favorecería, a quién no; las medias que debería realizar cada uno en cada tramo..., y que si los más potentes eran veloces ganarían igual..., todo ello sin tener en cuenta el factor "NyH", el banco nieve y el sucio hielo; dos elementos que hacen de una carretera de montaña todo menos una pista por la que desbocar a nuestros caballos, de vapor.
Las ciudades de partida, a las que el Organizador otorgó tal honor, de esta edición fueron Varsovia, Atenas, Estocolmo, Montecarlo, París, Glasgow y Francfort; ciudades desde las que partían centenas de dedos cruzados para que la climatología respetase a corredores, máquinas (en número de 346) y aficionados. Por toda Europa y con un Destino, la victoria en el principado, laureles que hasta los más republicanos, y no hablo de política, y sí de franceses, querían obtener para sí, sus marcas y orgullo patrio. Los españoles, que a orgullo nacional nos ganaban pocos, salíamos como comparsas, participar es lo importante, que se dice a los niños y perdedores, como si el que va a ganar fuese tonto.
Y hete aquí la trampa..., el Panhard PL 17, clarísimo favorecido por los reglamentos franceses (marca francesa en la órbita de la Gran Citroën, en otras ediciones también favorecida), pues no se tenía en cuenta la capacidad v. potencia; y los PL 17, de motor de serie homologado de 42 cv montaron el "poderoso" propulsor Tiger, capaz de erogar la "terrorífica" cifra de 62 cv. Sin duda un handicap envidiable, para el resto de comptidores, que se conformaban con los números que les habían dejado. Vale, la velocidad era otra cosa, pero resultó ser un Monte con nieve hasta en el carnet de identidad; y ahí los muy veloces y pesadotes carecían de ventaj alguna. Y aquí, Robert, fotografiado con la vista en la siguiente curva, comprobando si entran o no en la que toca sortear...
Cómo entraba de morro el francés..., dos que pese a no partir como favoritos desde Charbonnieres se hicieron con el Rally en el Turini, el Echarasson y el Cucheron..., se hicieron los Panhard PL 17, no sólo este buen par de afortunados; Maurice al volante y Robert a las Notas; Notas patrocinadas, según tengo en mis notas, por una marca francesa. A este punto me parece interesante hacer notar que algunas marcas hacían entrega, a los pilotos que utilizaban sus productos, de unas notas de los tramos más o menos pormenorizadas. Y digo más o menos, porque en este Rally, las más criticadas fueron las Notas de Castrol, gracias a la lectura incorrecta de una curva del Turini. Lectura que llevó fuera de la misma a un buen número de participantes.
Una edición muy lenta, poco emocionante, porque lo más interesante estaba en los ajustes de guarismos varios tras a carrera pero histórica. Para dar una impresión de lo que influyó el índice corrector en el resultado final baste una clasificación, la real, comparada con la que hubiera sido sin ese factor de comparación:
Resultados Monte Carlo 1961: 1.) Panhard -M. Martin-; 2) Panhard; 3) Panhard; 4) Saab -Carlsson-; 5) BMW; 6) Skoda; 7) Renault; 8) NSU; 9) Renault; 10) BMW; 11) Panhard; 12) Sunbeam; 13) Sunbeam -Hopkirk- y; 14) Volvo -Andersson-.
ResultadosMonte Carlo 1961 sin factor de comparación: 1) Citroën DS19 -Trautmann- ; 2) Saab -Carlsson-; 3) Volvo -Andersson-; 4) Citroën; 5) Citroën; 6) Mercedes-Benz; 7) Mercedes-Benz; 8) Mercedes-Benz; 9) Sunbeam -Hopkirk-; 10) Skoda; 11) Ford; 12) Renault; 13) Mercedes-Benz; 14) Citroën.
En negrita los primeros en ambas situaciones y los pilotos que coincidirían en ambas listas de clasificación, aunque en distintas posiciones. Dramática la desaparición de los Panhard y, por otro lado, ascenso interesante de los Mercedes-Benz. El morro más de cerca...
Y aprovechando que nos acercamos a su morro..., detalles de calidad y artesanía; calcas (tres de ellas a la vista) de procedencia Virages encargadas especialmente para este modelo de CHECKERED FLAG SLOT CARS.
Los cromados son, como el resto de la pintura del coche, obra de Manel Espallargas. La resina es de origen el los talleres de inyección del marsellés Víctor di Natali.
En detalle la placa trasera, cromados a pincel, matrícula y, paragolpes en metal blanco de origen Hobbyproject.
Matrícula, placa, faros, cromados y paragolpes desde otro punto de vista.
Y por si quedan dudas, y pese a que Jordi siempre me dice "no hagas fotos a bocajarro ...insulto cariñoso....", nos colocamos algo más de cerca..., merece la pena.
Los Conjuntos Montados; neumático, llanta, tapacubos y calca del mismo, tienen distintos orígenes. Así los neumáticos son los italianos de BRM, un neumático de compuesto medio; aunque por cotas y dibujo es resulta a priori el más competitivo -rodar en pista-, aunque tal vez pueda decir que en realidad resulta ser el adecuado, como explicaré. Las llantas (16") son de aluminio y fabricación propia, mientras que los tapacubos se han reproducido mediante inserts en resina, válvulados, encajados en la llanta metálica. La calca central de origen citado, Virages. Calidad de materiales y buena ejecución de conjunto nos llevan a plantearnos la gran duda de todo cochecito de slot, máxime cuando éste ha sido fabricado en resina...
¿¿Andará en pista..., o sólo será un cochecito "bonito" más con motor, cables, guías...??
Antes de salir de dudas lo llevamos al taller. Chasis extensible, o universal, de marca Slot Classic y origen Mecánica del Modelismo (Cartrix-Slot). Un chasis extensible que, pese a sorpresa de algún "buti descoloreitor" lleva en el mercado un par de lustros. El chasis va unido a la carrocería mediante tres tornillos; dos atrás y uno delante tras el eje, encontrándose los asientos en la propia carrocería, dejando libre la bandeja. A ambos lados del chasis encontramos dos piezas en resina; dos piezas que no sólo sirven de embellecedor, sino también de "peso abajo", algo que como veremos incide en su comportamiento en pista de forma directa.
Cables estándar de la guía al pequeño motor Mabuchi. Piñón de nueve a corona de 27 de origen Sloter nos asegurarán una correcta transmisión de fuerza. Motor más que suficiente para, cuando menos, dar movimiento al conjunto.
En principio no realizaré ninguna mejora, de hecho no la llegué a hacer, salvo pegar el motor con algo de cola. Un cochecito en el que merece la pena entrar.
Como dije anteriormente, el chasis no esconde nada...,
..., más que calidad de materiales, algo a lo que alguna que otra vez pasa a un quinto plano en algunos cochecitos de resina para slot; será que algunos pensaban que todos estamos dispuestos a comprarlo todo. Un coche de rally o de resistencia tiene que andar por un circuito casero; y uno de raid ha de hacer lo mismo, no ya por uno de raid, al menos por uno casero...
Cojinetes y ejes son también de origen Hobbyproject.
Para mi sorpresa, su salpicadero, capilla y volante. Guarda la sencillez de su original; incluyendo taquímetro y marca en el centro del volante. Volante del que me ha encantado una "fricada"...
Sus ergonómicas marcas para los dedos de quien lo conduzca...
Aunque sin dedos para ese magnífico volante, los ocupantes se han reproducido completos; como la banqueta trasera corrida y los dos asientos delanteros independientes.
¿Y en pista? No sólo funciona, va muy bien; no porque haga tiempos estratosféricos, qué frase tan manida y útil cuando ni se prueba un cochecito de resina. Mi trazado está dividido en dos partes, una menos exigente para coches de resistencia y resina, prácticamente un óvalo plano, y otra para cochecitos de rally, con subidas y bajadas de gran desnivel, curvas con cambio de rasante, todo quesitos... Para mi sorpresa, en el "óvalo" funcionaba de lujo. ¿Por qué no probar en el circuito completo? Una ez en marcha el Panhard se mantenía en el carril, pese a su guía, corriente, cables de serie, mabuchi..., y chasis Slot Classic, un chasis con el que no siempre he logrado ni tan siquiera hacer rodar un cochecito. Pese a sus llantas y neumáticos (por medidas) el Panhard no tendía al vuelco, me olvidé de croquetas y comencé a no temer por la vida del artista, largas tandas donde pasarme significaba largas derrapadas. Cierto, tal vez por la suciedad de la pista en determinada zonas, error, pruebo con otro clásico de rueda estrecha y vuelca. Señores, CHECKERED FLAG SLOT CARS ha obtenido aquéllo que todos deseamos con su primera referencia, el PANHARD PL 17.
Salud
PS: Próxima entrada..., versión civill de esta preciosidad.
2 comentarios:
Wenas!!!! Fantástica entrada amigo, el coche veo que está muy bien hecho, aunque, como ya sabes, no está dentro de mi "criterio" de coleccionismo.
Gracias una vez más por compartir unas fotos fantásticas y un texto rico, rico, rico.
Adèu i gassssssss
Precioso. Aunque no se como se podía ganar un Monte Carlo con este trasto. Pero impresionante el coche hasta el salpicadero que es idéntico al original, que lo recuerdo por haber subido en este bicho.
Gracias Luis
Saludos
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