FORD F3L P68

RACER, las resinas más espectaculares y sin duda de las mejor ejecutadas pese a ciertas liberalidades con respecto a su escala, unas 1:32 algo más liberal, presentó hace unos meses la espectacular, achatada y curvilínea Ford F3L P68; una máquina a la que Ford UK de la mano de Alan Mann deseó confiar la reedición de los éxitos cosechados por las bestias pardas de la matriz norteamericana. Sin embargo esos éxitos nunca llegaron; y es que si alguna vez un prototipo de Ford fracasó ese fue el F3L ó P68; aquí motorizada por Slot.it.




La unidad de las fotografías es la P68 con la que la escudería Alan Mann Racing disputó el 33 RAC Tourist Trophy en Oulton Park con el dorsal número 31..., aunque tampoco me perderé mucho en detalles pues las siguientes instantáneas creo que hablan por sí mismas.




En su día, cuando hablaba de ella en MÁS SLOT, consideraba que esta era una apuesta arriesgada de la marca italiana, hoy parece que otra, también italiana, se arriesgará reproduciéndola en plástico, posiblemente más cercana a las E-Series (ay!!) de la marca del óvalo que a la pequeña e inestable P68. Y sí, sigo manteniendo, al menos para el mercado español, que es una apuesta arriesgada porque a pesar de ser una máquina de bellísima factura sus éxitos en competición se cuentan por..., una pole.




No hay duda de que la P68 era una máquina rápida, y contaba con uno de los mejores motores de la historia, el que sería, el Cosworth DFV V8. Tal vez su mayor virtud fue su perdición; una máquina sencillamente inadecuada para las vibraciones del DFV..., motor que este año en la Fórmula Uno puede dar mucho que hablar..., o puede que no..., lo que va apeteciendo que comience no es normal... Dichas vibraciones se podían deber a que el motor, a diferencia de los monoplazas, no formaba parte del chasis.




Sea como fuere, que no fuere una máquina exitosa como sus, en teoría, predecesoras GT40's, no quita para que no fuese una máquina bellísima. Y digo en teoría porque la P68 no fue concebida como sucesora de las GT 40, era sencillamente diferente, menores y británicas como trataba de aclarar en mi anterior artículo.




No sé si dije que sería breve, si no lo hice es buen momento, no hablaré de la tan manida guerra de Ford V. Ferrari y sus últimas batallas; ni de la 33 RAC Tourist Trophy en Oulton Park (de la que ya hablé) y que fue uno de los mejores espejismos para la P68. De la P68 seguro que volveré a hablar con más tiempo en próximos artículos..., ya de Racer ya de la otra...




Alan Mann ya había cosechado grandes éxitos en resistencias y rallies; y con la P68 pensó en conquistar no sólo el título británico, quería ser la representación de la isla en Europa, en la Continental, aunque esa no era la marca, sino Goodyear, neumáticos que sí resultaron ser efectivos montados en sus llantas de magnesio de 15 pulgadas.




Aunque parezca grande, la P68 es realmente pequeña, a ninguno nos pasaría de la cintura en la parte más alta; estrecha, bajita, incómoda, vibrante..., realmente insufrible, una pesadilla de la que muchos pilotos huyeron..., aunque esa será otra historia...




Salud