¿Seguimos hablando de desierto?... seguimos hablando de la Colección Dakar de la revista Más Slot, seguimos hablando de Raid Slot.
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Que me llegase puntual el coche, tercer envío de la Colección Dakar Más Slot (a la que todavía es posible apuntarse - hacer click aquí), tras el Touareg de Sainz junto al Mitsubishi efecto arena y al Buggy rojo, el PEUGEOT 405 de la duodécima edición del DAKAR, el pilotado en 1990 por Ari Vatanen con Bruno Berglund de navegante..., había pensado en acompañar fotos que nos transportasen a aquéllos inicios de los años 90, que nos diesen un aire ochentero...
Pero después pensé que en 1991, año capicúa, como lo fue el 2002... año en que ya se valoraban muy bien estos, en su época, poco exitosos TT de Scalextric, las fotos pese a ser película ya no perdían como lo hacían aquéllas, inventos del demonio, que se oxidaban en exceso. Y de capicúa en capicúa no me pienso preguntar, porque me tendría que contestar, para el próximo capicúa, ¿dónde estarán estos coches? ¿Dónde estarán estas fotos? ¿dónde nuestros comentarios?...
El Rally de los Faraones y el Dakar fueron las dos "musas" de Scalextric, sus reproducciones es posible que hoy, por detalle, fidelidad y nivel de acabado, hiciesen saltar indignados a muchos de los que hoy recibimos con alegría estas maravillas recuperadas por Scalextric y Más Slot para ponerlos, en estado de nuevo, a disposición de todos, y no sólo de quienes en su día no los estrenaron y lo guardaron o de quienes sí compran en páginas de subastas.
El paso del tiempo es evidente, no sólo en sus trencillas, también en algunos elementos dinámicos y funcionales. Su quesolor sin embargo se ha mantenido como el que cualquiera pudiera recordar cuando en su día los adquirió. A la base, de cartón, vienen sujetos con dos alambres cubiertos en un plástico protector de dedos y miniaturas.
Y aquí me asaltaron las dudas; ¿lo dejo tal cual o; lo "desato"?, que el pobre ya ha estado mucho tiempo a la sombra. ¿Lo dejo como en su primer año capicúa para que llegue intacto al que todavía no hemos llegado?, o ¿disfruto de él sabiendo que ya he vivido todos los capicúa que estaban en mi lista?... no era una pregunta, no lo voy a no disfrutar en pista...
Ari Vatanen, campeón del mundo de Rally y cómo no, campeón del mítico París Dakar..., por cuatro veces, en 1987 la primera y consecutivas las en 1989, 1990 y 1991... Un hombre que no ha dejado de correr, ni el París Dakar, ni pruebas de WRC (Finalndia 2003, Dakar 2005...), un hombre incombustible que hoy está... en política, de la mano del partido encabezado por Nicolas Sarkozy. Es curioso, Ari Vatanen es, a parte de piloto en activo (última victoria que recuerdo fue en una etapa del Dakar en 2005) Eurodiputado por Francia..., "lo que se agradece ganar con marcas francesas en ese país..."
Ari Vatanen, el hombre récord del Dakar, con cuatro victorias en cuatro ruedas, se convirtió en el número uno de la gran aventura africana ganando este París - Trípoli - Dakar de 11,420 kilómetros (8.564 km. de especiales) cruzando desde Francia los países de Libia, Níger, Chad, Malí, Mauritania y Senegal.
Los datos ya no asombraban en esta duodécima edición, 236 coches, 136 motos y 93 camiones (que retornaban a la prueba), en cualquier caso, llegar seguía siendo el reto final que en esta edición sólo lograrían llegar 64 coches, 46 motos y 23 camiones, es decir, 133 de los 236 que partieron de París. En coches; la categoría que hoy nos interesa, partían como favoritos los que al final se hicieron con el triunfo, la escuadra Peugeot, liderada por Vatanen (Dorsal 203), no sólo ponía sobre la arena a sus temibles 405, los 205 peleaban contra ellos y contra los Mitsubishi de Lartigue y Schelesser entre otros, los Buggy de Arnoux y Auriol, los Lada de Ickx y Tambay, los Range Rover de Raymondis y nuestros Serviá-Puig.... De todo menos fácil para la marca del León.
Me encantaría resumir las 20 etapas (incluidas las dos semi-prólogos) en este pequeño artículo, pero la paciencia del lector tiene un límite y si no lo hago hoy siempre habrá tiempo de hacerlo en otra ocasión... Eso sí, destacar las siete victorias de etapa, ya en suelo africano, de Vatanen y las victorias en motos de los españoles Arcarons (2) y Más (1). Así como el octavo puesto de Porcar, el decimotercero de Prieto al volante de sus Nissan y el 34º de Serviá al volante de su Range Rover. En motos Mas segundo y Arcarons séptimo fueron los mejores españoles.
En 1991 la victoria sería nuevamente para Vatanen, pero al volante de su Citroën ZX, por lo que aprovecharemos para ver los pequeños detalles, como es habitual, del 405 más de cerca y casi 20 años más tarde (Pilotos azules - Cascos amarillos).
Piloto y navegante típicos de la marca española, con el coche decorado con sus típicos adhesivos plásticos... qué diríamos hoy... menos mal que hablamos de otros tiempos...
Los cristales de las ópticas siguen pareciéndome fantásticos.
En cualquier caso, el nivel de detalle era, para los tiempos que corrían en el sector juguetero del slot, muy bueno. Nada que ver con el coleccionismo de vehículos estáticos, también es cierto...
¿Coche del año? ¿Imperativo de marca?... en cualquier caso, coche del año en Europa, pero sigo con la duda, ¿lo lució en el Dakar?.
Impresionante alerón trasero...
Alerón bajo el que se esconde la plancha que nos serviría para rescatar a nuestro Peugeot de las arenas del desierto en caso de que desinflar del todo no diese resultado.
Es un coche bonito, muy bonito, se mire por donde se mire...
Incluso por el dorsal de Vatanen/Berglund tomado prestado, para esta ocasión, al también campeón del mundo Björn Waldegard y su navegante Fenouil..., ya sólo e falta que alguien saque esta máquina con su librea CAMEL original y su dorsal correcto... todo se andará, eso espero...
Hoy los detalles del techo serían suficiente para cubrir el expediente, pero que en la época eran de aúpa!!
Y a mí que lo de coche del año me sigue sin cuadrar..., pero bueno, peor es lo del dorsal... 203, Vatanen era el 203.
Con respecto a las llantas, qué decir, que ya se tenían en cromado y las cosas no deberían estar como para pintarlas en blanco.
Pero esto ya es un tema más de taller que de decoración, o no... en cualquier caso nos servirá para terminar esta pequeña entrada del Peugeot 405, un coche que sin ser novedad, es "La Novedad".
Y meterlo en pista significará pasarlo por el taller, ¿no?... desmontarlo, estudiarlo y por supuesto, prepararlo para mi próximo Raid..., que me temo utilizaré un 405 que temía utilizar...
No hay suda, "Made in Spain" y detalles técnicos fantásticos, unos coches que se adelantaron a su época y que hoy siguen siendo los número uno, tantos años después y en pista siguen siendo, en muchos terrenos, prácticamente imbatibles.
Pero procedamos a desmontarlo...
Sin, por supuesto, descubrir nada nuevo, pero sí algunas otras cosas que el tiempo ha enseñado a apreciar...
Sus clásicos, efectivos y todavía utilizados amortiguadores, cojinetes, sistema de doble reducción (Relación de desmultiplicación de 6).
Las llantas, salvando que en el original eran blancas, son heredadas del resto de modelos de TT de Scalextric, salvedad hecha para los Buggy.
Y qué decir de su incombustible RX 7 concebido en exclusiva para los TT, un motor que proporcionaba la tracción 4 gracias a su ingenioso sistema de transmisión.
Pero desmontemos el chasis para ver con más en detalle el común denominador de todos los TT de Scalextric:
Donde descubrimos cómo se transmitía la fuerza al tren delantero...
En breve me pondré a trabajar sobre él, y pese a mis pocos conocimientos de preparación, y peores resultados, propondré una serie de cambios en él que los harán, en determinados raids, algo más efectivo.
Ya dije que Lawrence estaba al caer...
Una preciosidad de coche que ahora está más a mano que nunca, un modelo que se completará son el conocido como "Pioneer"..., por ahora, el tercer envío de la Colección Dakar...
Salud
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